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Dolor de fístula anal
Diagnóstico de fístula anal.
se diagnostica con el examen por parte del especialista. Sin embargo, a veces la fístula no es visible a simple vista y es posible que se necesiten otras pruebas para identificarla, como: B. anuscopia, ecografía o resonancia magnética. Por otro lado, si se sospecha la presencia de otras enfermedades (como la enfermedad de Crohn), puede ser necesaria una rectocolonoscopia.
Tratamiento de fístula anal
La cirugía es la única forma de extirpar la fístula anal. Para prevenir esto, se debe tener en cuenta la higiene de la región, la dieta y la falta de ejercicio.
Fístula anal: causas, diagnóstico y tratamiento.
Una fístula anal es una comunicación (túnel) entre la piel alrededor del ano y el interior del recto. En ocasiones, la fístula anal aparece como manifestación de otras patologías, como la enfermedad de Crohn.
Causas de una fístula anal
El origen de la fístula anal es generalmente un absceso que drena hacia la piel, provocando la comunicación entre esta y el interior del ano o recto. Sólo queda una fístula anal en la mitad de todos los casos de drenaje de abscesos.
Cómo diagnosticar una fístula anal
La fístula anal se manifiesta como secreción crónica de pus o heces a través de la abertura de la fístula en la piel del ano.
El criterio más importante para el diagnóstico de la fístula es el examen anal por parte de un cirujano especializado en coloproctología. Ocasionalmente, pueden ser necesarias pruebas de diagnóstico por imágenes, como una ecografía anal o una resonancia magnética pélvica.
Dolor de fístula anal
Las fístulas anales se clasifican en simples o complejas según el grado de afectación del esfínter anal.
El tratamiento a utilizar es la cirugía, y la técnica variará según el tipo de fístula y el historial médico del paciente y las condiciones locales (antecedentes de cirugía anal, enfermedad inflamatoria u otros factores de riesgo para la aparición de incontinencia anal). En la mayoría de los casos, la fístula es simple y puede tratarse de forma ambulatoria. Por lo tanto, el paciente solo permanece en un hospital durante unas horas. En estos casos, y en general, podrás volver a trabajar en poco tiempo.
Cuando las fístulas son complejas, la fístula es más laboriosa de tratar y requiere una gran experiencia por parte del coloproctólogo para decidir cuál de las técnicas actuales es mejor para el paciente y su tipo de fístula. Actualmente existen tratamientos como LIFT (cirugía mínimamente invasiva del ano), tapones, adhesivos, láseres, clips y, en casos muy seleccionados, incluso el uso de células madre.
No todas las opciones son ideales para todas las fístulas o para todos los pacientes. Para minimizar el riesgo de complicaciones como recaídas, incontinencia u otras, es vital que el cirujano que evalúa y trata a los pacientes tenga una amplia experiencia con la afección.